martes, 29 de enero de 2013

Sin periodismo no hay democracia. Y no es broma.



Los periodistas hace tiempo que no estamos para celebraciones, ni siquiera para la de la festividad de nuestro patrón, que fue hace unos días y que sirvió si acaso para recordarle al mundo, a quien quiera escucharnos, esa ya popular frase que dice que “Sin periodistas no hay periodismo y sin periodismo no hay democracia”.

Pues eso, que como sigamos así nos vamos a quedar sin periodistas, sin periodismo y, por supuesto, sin democracia. El pasado jueves se celebró San Francisco de Sales, patrón de los periodistas, pero como les decía la profesión no está ni mucho menos para fiestas. Aunque no sea noticia habitual en los medios de comunicación, quizá porque queda “feo” que los propios medios informen sobre sus despidos, eres y reducciones de salario, para quienes no lo sepan les diré que después de la construcción, el periodismo es el sector más castigado por la crisis.

El número de periodistas en situación de paro se ha triplicado en un año, desde 9.937 personas en septiembre de 2011 a 27.443 personas en el mismo mes de 2012, según informaron durante la presentación del 'Informe Anual de la Profesión Periodística 2012' que realiza cada año la Asociación de la Prensa de Madrid. A todo ello hay que añadir el cierre de más de 60 medios de comunicación en los últimos tres años, con lo que esto implica de pérdida de pluralismo.

Paro, eres, ofertas de empleo sin remuneración o en concepto de prácticas en las que irónicamente se exige licenciatura y experiencia, reducciones de salario en plan o lo tomas o lo dejas, sobrecarga de trabajo, reducción del número de medios...Ése es el panorama que rodea a la que para mí es y será una de las profesiones más bonitas y necesarias del mundo. Pese a todo y por encima de todo.

Con los datos en la mano, se ha dicho que el periodismo vive una crisis laboral con forma de tsunami aunque yo, que sé que los periodistas somos una especie fuerte, confío en que la profesión, al menos parte de ella, será capaz de resistir y seguir adelante porque prefiero pensar que, como en la historia real sobre el tsunami que cuenta la película “Lo imposible”, los milagros a veces existen y eso es casi lo que necesitamos.

Esta semana, San Francisco de Sales, se ha quedado sin apenas celebraciones, aunque ha servido de excusa para que los periodistas recordemos que sin nosotros no hay Periodismo y no hay Democracia.

No sé si el año que viene estará la cosa para agasajar al patrón, pero lo que sí sé es que podamos o no ejercer nuestra maravillosa profesión, aquí estaremos para recordarle al mundo que no somos médicos ni maestros ni bomberos, pero también curamos, enseñamos y protegemos a la sociedad y somos un pilar fundamental para sostener esta malherida democracia con los poderes tan deteriorados.

No se olviden de esto, sin nosotros, sin los plumillas, el mundo se quedaría mudo, ciego y sordo y nadie estaría ahí para contarlo.


martes, 22 de enero de 2013

San Google Bendito...¿O no?

Sin memoria. Así nos vamos a quedar como sigamos abusando, que no usando, del que yo llamo cariñosamente “San Google Bendito”. Y es que, ya saben que hoy en día se hacen estudios sobre cualquier cosa y ahora se ha hecho público uno de la Universidad de Columbia, en Estados Unidos, que dice que como continuemos usando el famoso buscador de Internet para todo nos vamos a quedar atontados perdidos.

Según dice el informe fruto de esta investigación, los educadores y científicos habían empezado a advertir que el hombre se estaba haciendo cada vez más dependiente de la información en Internet, pero hasta ahora había pocos estudios que lo confirmaran. De este modo, la investigación de la psicóloga Betsy Sparrow, profesora adjunta de esta Universidad, ha revelado que Internet funciona como una especie de "memoria externa" que nos hace retener cada vez menos información.

Es obvio que las nuevas tecnologías y especialmente Internet han supuesto un antes y un después en nuestra manera de vivir. Somos muchos quienes no podemos concebir ya nuestro día a día sin herramientas que ahora son tan elementales (e imprescindibles) como el móvil, el ordenador y, cómo no, Internet y todo lo que implica.

Yo me considero una apasionada de todo ello, pero como ocurre a menudo, creo que el problema radica en el mal uso y el abuso que en muchas ocasiones se está haciendo. San Google Bendito puede no ser tan bendito cuando uno lo usa para buscar cualquier tipo de cosa de manera sistemática sin intentar hacer el esfuerzo de pensar, de buscar en nuestro propio disco duro, en nuestra memoria, que es la única que además no nos fallará aunque se vaya la luz o se caiga la red y, sobre todo, es la única que nos va a acompañar, queramos o no, hasta el fin de nuestros días.

El problema puede resultar anecdótico, pero a mí este estudio me ha hecho reflexionar sobre lo preocupante que puede resultar y en los futuros efectos sobre todo en las nuevas generaciones que han nacido con un ordenador y un móvil debajo del brazo porque al menos los que ya tenemos una edad hemos ejercitado nuestro cerebro tirando de memoria interna durante más tiempo.

El mencionado estudio sugiere que la población ha comenzado a utilizar Internet como su "banco personal de datos", un fenómeno conocido como "efecto Google", y los ordenadores y los motores de búsqueda online se han convertido en una especie de sistema de "memoria externo" al que puede accederse a voluntad del usuario y al que la memoria humana se está adaptando.

Y una de las conclusiones más peligrosas. El estudio ha constatado que cada vez más personas no memorizan datos porque confían en que pueden conseguirlos y en su habilidad para encontrarlos. Y piensan, ¿para qué me voy a esforzar?.

No quiero parecer fatalista, pero a esta marcha no sé yo si las futuras generaciones sabrán siquiera escribir las palabras completas y con su ortografía correspondiente y si serán capaces de hacer memoria para buscar algo sin darle al “enter” después...

Hay cosas que me preocupan mucho más que eso. Que sí, que tenemos problemas más importantes todos en los que pensar, pero por favor, cuando no se acuerden de algo intenten primero buscar en el hipocampo, que es la parte del cerebro relacionada a la memoria y aprendizaje, antes de tirar de disco duro externo, a ver si así no acabamos todos alelados.

Y sí, vale, lo del hipocampo lo he buscado en San Google Bendito.